One Block se ubica en Querétaro, una de las ciudades con más potencial en México. El carácter estético de esta casa se planteó como un solo elemento volumétrico, que conjuga la fachada de manera que esta asemeja un bloque de piedra, haciendo justicia a su nombre: One Block. De igual manera, otro elemento por el cual destaca One Block es la manera en la que se implementaron terrazas con celosías de tabique, que reaccionan al contraste de luz natural y privacidad. Implementando este concepto se logró obtener espacios que reciben un baño de luz que incita a tomar un café por la mañana mientras se lee un libro, o incluso apreciar la cromática del crepúsculo; siempre tomando en cuenta la importancia de que el usuario no sienta que se atenta en contra de su privacidad.
Asimismo, esta obra interpreta el estilo mexicano contemporáneo por medio de la propuesta de materiales, la cual busca enaltecer el uso de elementos naturales tales como el tabique, la laja negra, y madera en interiores.
Por otro lado, su diseño y construcción responden al reto de levantar una casa sobre un terreno de tan solo 177 m2, sin tener que sacrificar elementos como un jardín adaptable o una cochera espaciosa. En efecto, se optó por cargar la construcción hacia un lado, con el fin de obtener un jardín lateral, fluido por la zona de estacionamiento que comprende una pérgola de acero y madera, así como espacio para dos vehículos.
La coreografía de circulación en planta baja sigue un ritmo natural en donde se encuentra cocina, sala y comedor, desde los cuales se puede obtener una vista sobria hacia el jardín. A fin de crear un diseño bajo la premisa de activar y maximizar el uso de espacios flexibles, se decidió proyectar una habitación con baño completo en planta baja, que puede recibir distintos usos dependiendo de las dinámicas del habitar del usuario. En planta alta se repite este módulo dándole forma a la habitación secundaria.
Con el objeto de lograr una fluidez espacial entre los elementos de la planta alta, se designó un área cuya funcionalidad puede variar desde una sala de televisión hasta un estudio artístico, u oficina. Finalmente, la habitación principal retrata la necesidad del usuario de sentirse acogido, sin dejar de lado el diálogo que se crea con las demás zonas de la casa.
El deber de todo arquitecto es responder a los retos constructivos que se le presentan de acuerdo al contexto tanto social, como físico. One Block, siendo una casa que crea una dualidad entre la sobriedad de su volumetría y el dinamismo de espacios en su interior, no fue la excepción a esta premisa.